Plaza de Toros “De Acho?

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En Lima está una de las plazas de toros más prestigiadas y anti­guas del mundo, cuyas instalacio­nes mandó renovar completa­mente el virrey Amat en 1766, dándole la forma octogonal que existía hasta 1946, año en que nuevamente fue totalmente transformada para darle la fiso­nomía que tiene actualmente.

Al hacerse la transformación total de la estructura de la Plaza de Acho en 1946, se le dio forma completamente circular, se cons­truyeron tribunas de cemento y se aumentó al doble su capacidad prolongándolas bajo el nivel del piso, aprovechando la amplitud del antiguo ruedo, que quedó así reducido en forma considerable. El techo sostenido por columnas ha quedado como vistoso adorno arquitectónico en la parte alta de los tendidos.

La vida taurina en Acho se ini­ció realmente después del terre­moto de 1746, cuyos estragos fueron muy grandes. El hospital de San Lázaro quedó totalmente destruido y a falta de fondos para reconstruirlo se decidió hacer la plaza de toros con tribunas de madera pra aplicar a la mencio­nada obra los ingresos que diera. Según parece, existía ya la cos­tumbre de correr toros en este sitio, que entonces se llamaba de Acho.

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