PAISAJE “LUNAR”
Los dibujos están ubicados a lo largo de casi 50 km. abarcando hasta 4 pampas (Palpa, Ingenio, Nasca y Socos). Se hallan entre los Km. 419 y 465 de la Panamericana Sur.
Según estimaciiones de María Reiche y del arqueólogo Alejandro Pezzia, las líneas cubren un área de 350 Km2.
La región es una de las más secas del mundo y se encuentra a unos 400 Km. al sur de Lima, y a 50 Km. al Este del mar.
Pablo Macera indica que asociados con estos diseños existen 40 plazoletas con diversas formas (triángulos, trapecios).
Se supone que tales construcciones tuvieron un carácter ceremonial.
LOS 32 GEOGLIFICOS: 500 Km2
Las figuras suman más de 32, pudiendo dividirse en animales marinos y terrestres, figuras humanas y geométricas.
Los dibujos se ha hecho en una escala extraordinariamente gr ande. Entre los mayores destacan el Lagarto (180 m), el Pelícano (135 m), el Cóndor (135 m), el mono (90 m), la araña (42 m)
Los animales son: mamíferos (la ballena, el perro, dos llamas),
aves, (garza, grulla, pelícano, gaviota, patillo, colibrí, loro), íeptiles (lagarto, lagartija, iguana, serpiente), peces (dos ejemplares no identificados) e invertebrados (araña y acaso el caracol).
Las figuras vegetales, corresponden al árbol de huarango, la raíz de la yuca, el cochayuyo, el alga varec, el cactus (flor).
La dimensión de las figuras es formidable. María Reiche la matemática alemana que ha estudiado los geoglifos de Nasca por más de 30 años no deja de maravillarse. Describe que “hay un ave tan grande que uno se coloca en la punta de un ala, y no ve ni la cabeza, ni la otra ala. Tan solo ve unas pocas líneas sobre el suelo, empero no puede percibir lo que es en su conjunto, pues no se identifica nada, ni la cabeza, ni el pico”.
“PROEZA DE SERES SUPERIORES”
La Reiche captó lo portentoso de esta obra, y así, como los Nas- cas, hace 2 milenios acompañaban en solemnes y abigarradas ceremonias mágico-religiosas, el inicio del año, la danza imperturbable de las constelaciones “divinas”, la luna llena, el inicio del verano, el invierno, etc. La Reiche sigue inseparable de la tierra donde se marcaba el tiempo, se auscultaba el devenir del tiempo, del pueblo, de su mundo compuesto por 3 elementos funda
mentales: tierra, agua y fuego, que también juntaron en su fina y colorida cerámica.
FIGURAS Y CONSTELACIONES
Illescas propone una serie de relaciones entre las constelaciones del hemisferio sur y los geo- glifos de Nasca.
Como ya hemos señalado la figura del “mono” correspondería esencialmente a la constelación del Escorpión. La figura de la “araña” podría ser identificada con la constelación del Navio. El triángulo se encontraría inscrito dentro de la constelación del Can Mayor.
En el caso de la figura del “pájaro fragata”, indica que tal geo- glifo -que tiene la forma de un pájaro con las alas desplegadas y mide 120 metros de envergadura- tiene el pico orientado hacia el norte, en el lugar que le correspondería en el planisferio norte. En su trazo han sido tomadas en consideración las constelaciones Pavo real, Indio, Grulla, Microscopio, Aerostato y Pez Austral; dos estrellas de Acuario y una de Tucán.
LOS ESPEJOS ASTRONOMICOS Y LA “INVERSION” DE LAS CONSTELACIONES
Los astrónomos andinos utilizaron desde el Precerámico la Observación Astronómica por Espejos.
Tal hecho se demuestra en los numerosos recipientes de piedra “pocitos” hallados,en superficie. De tal forma gravaban en piedra los principales puntos brillantes que emitían las estrellas de diversas constelaciones.
Carlos Milla explica “que nuestros antiguos astrónomos proyectaban en las pampas las constelaciones que veían en el cielo, aplicando principios simples de reflexión óptica”.
Esta acción provoca que la imagen captadas en “pocitos” resulte invertida, de igual forma como sucede cuando nos miramos en el espejo, los objetos situados a la derecha se ven a la izquierda y viceversa.
Agrega que “si varios operadores con sus espejos de agua ubican simultáneamente el zenit o punto de proyección de cada una de las estrellas de una constelación, pueden obtener una proyección aproximada de la constelación sobre la pampa. Esto es lo que representaría la cerámica nasquense”, quienes por medio del invento de la cerámica habían conseguido trabajar con finos “espejos portátiles”, superando a los líticos estáticos.
Para graficar su hipótesis Carlos Milla muestra una foto correspondiente a un ceramio de cultura Nasca, donde se puede ver claramente representada por la técnica del espejo a la constelación de la Cruz del Sur. La orientación de la Cruz aparece invertida, por el fenómeno anteriormente detallado. (Ver lámina LXXXV del libro “Paracas” de J.C.Tello).
LA CRUZ DEL SUR: CONSTELACION RECTORA
Según Milla la constelación rectora del trazado de las líneas de la Pampa de Nasca es la Cruz del Sur, “por serlo del mundo andino”.
Fundamentándose en la inversión de las figuras reflejadas indica que “si observamos el mapa estelar del Hemisferio Austral, en el que aparece la constelación de la Cruz del Sur, vemos como ésta se encuentra debajo de la constelación del mítico Centauro – la “llama celestial” – cuyas dos “patas delanteras” vienen a ser las estrellas Alfa y Beta de Centauro, que son las guardas o las guías y parecen señalar hacia la Cruz. “La mitología andina ha representado a este par de estrellas guías como los ojos de la llama madre”.
Nuevamente si observamos el mapa estelar austral “vemos que en el cielo la constelación “mono” se encuentra a la izquierda del eje mayor de la Cruz del Sur. Si observamos el mapa de María Reiche, de los geoglifos que han sido dibujados sobre la Pampa de Nasca, se contemplará que la figura reflejada del mono se encuentra a la derecha del alineamiento que representaría a la Cruz del Sur, es decir, invertida