SAN FRANCISCO Y LA ICONOGRAFIA DEL “POVERELLO D´ ASSISI”
POLITICSRuth Bader Ginsburg optimistic ‘over the long haul’ for US Quis autem vel eum iure reprehenderit qui in ea voluptate velit esse quam nihil molestiae consequatur, vel illum qui.
San Francisco es el Santo Patrono de Italia, Santo por excelencia de los ecologistas por su amor a la madre naturaleza; vivió al límite la pobreza evangélica por lo cual fue llamado “Il Poverello d´ Assisi”.
Nació en Asís (Perugia) en el año de 1182. De ser hijo de un rico comerciante de la ciudad en su juventud, pasó a vivir bajo la más estricta pobreza y observancia de los Evangelios. En Egipto, intentó infructuosamente la conversión de musulmanes al cristianismo.
En su juventud fue alegre y despilfarrador, su conducta cambia luego de ser hecho prisionero en la batalla de Ponte San Giovanni, en noviembre de 1202. Francisco estuvo cautivo por lo menos un año.
Lo liberaron porque cayó enfermo y esto le cambio el ánimo, su forma de vida: se volvió piadoso, realizo innumerables actos de caridad y peregrino a Roma. Un día en la iglesia de San Damián, el crucifijo le hablo diciéndole: “Francisco, repara mi iglesia que se cayendo en ruinas”. Francisco se dedicó a repararla, renuncio a la herencia paterna y se cobijó al amparo del Obispo de Asís. Así llevo 2 años de vida solitaria y eremítica. Restauro 3 iglesias en su pueblo natal: San Damián, San Pedro de la Espina y la Porciúncula. Es aquí donde toma el típico sayal franciscano junto con sus compañeros y donde se funda la Orden de los Frailes Menores en 1208, la primera Orden.
En 1212 toma los hábitos su convecina Clara de Asís, y junto con ella funda la Segunda Orden Franciscana (Clarisas). Como la orden era foco de atracción se acercaban a él numerosas personas que querían vivir el evangelio pero sin entrar en la orden, es así que 1221 funda la Tercera Orden Seglar Franciscana.
San Francisco fue el primer Belenista de la historia; a él se atribuye la construcción del primer Belén viviente en 1223.
A San Francisco, se le llama el “Serafín”, porque llevo en su cuerpo los estigmas de la Pasión de Cristo. El día 14 de setiembre de 1224, festividad de la Santa Cruz, Francisco, extremadamente débil, se encontraba en oración en el monte de Verna. Estando en éxtasis, se le apareció un Serafín alado que hirió gravemente las manos, pies y costado reproduciendo en su cuerpo las llagas de Cristo. Es debido a este hecho que a San Francisco se le representa con alas.
El lobo de San Francisco: es un atributo iconográfico basado en la historia de “el lobo de Gubbio”, este era un canino feroz que asolaba la ciudad italiana de Gubbio. El lobo era un depredador que había devorado tanto animales como personas. Presentaba tal ferocidad que nadie se aventuraba siquiera a salir de la ciudad. Francisco, movido por su compasión a los habitantes del lugar, buscó al lobo y lo conminó en nombre de Cristo a no hacer más daño a nadie. Apenas Francisco trazó la señal de la cruz, el lobo cerró la boca, dejó de correr, se acercó mansamente, y se echó a sus pies.
Conducido por Francisco hasta la ciudad, el lobo vivió en ella durante dos años hasta su muerte por vejez.
Las Tórtolas de Francisco: …Cierto muchacho había apresado un día muchas tórtolas y las llevaba a vender. Se encontró con Francisco, que sentía especial ternura por los animales mansos, y mirando las tórtolas con ojos compasivos, dijo al muchacho:
«¡Oye, buen muchacho; dame, por favor, esas aves tan inocentes, que en la Sagrada Escritura representan a las almas castas, humildes y fieles, para que no vengan a parar en manos crueles que les den muerte!»
El muchacho, entrego las tórtolas a Francisco, y él las recibió en el seno y comenzó a hablar con ellas dulcemente: «¡Oh hermanas mías tórtolas, sencillas, inocentes y castas! ¿Por qué os habéis dejado coger? Yo quiero ahora libraros de la muerte, y os haré nidos para que os multipliquéis y deis fruto, conforme al mandato de vuestro Creador». Y Francisco les hizo nido a todas. Ellas se domesticaron, y comenzaron a poner huevos y a empollar a la vista de los hermanos. Y vivían y alternaban familiarmente con Francisco y los demás hermanos como si fueran gallinas alimentadas siempre por ellos. Y no se marcharon hasta que Francisco les dio licencia para irse con su bendición.
El Pelicano de San Francisco: Dentro del Simbolismo Iconográfico, el pelicano (junto con la paloma y la tórtola) representa fidelidad y castidad. Si el Pelicano muestra el Pecho abierto para dar de comer a sus polluelos, es un atributo iconográfico de Cristo.
El Cordón Franciscano: es un atributo cuya cantidad de nudos tienen distintos significados. Puede tener 3 nudos (representan los votos de Castidad, Pobreza y Obediencia), o 5 nudos (representan los 5 estigmas de Jesucristo durante la Crucifixión)
Bandera o Estandarte: Es un atributo iconográfico propio de aquellos Santos y Santas fundadores de Órdenes Religiosas, en ella llevan grabados los escudos o anagramas propios de cada orden.
La Calavera de San Francisco: Representación no sólo del rechazo de la vida de placer, sino de la «hermana muerte», este atributo iconográfico es el origen del apodo famoso en el Cusco, otorgado a los alumnos del Colegio San Francisco, a quienes se les conoce coloquial y cariñosamente como “Calaveras”.
Historias sobre las “catacumbas” (en realidad son Osarios) del convento de San Francisco del Cusco y algunas calaveras tomadas de aquellos serán motivo de otra historia…